Energía

El próximo líder mexicano debe impulsar las energías renovables

La apertura del sector energético ofrece nuevas oportunidades y despierta preocupaciones ancianos
<p>El candidato a la presidencia de México Andrés Manuel López Obrador (imagen: <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:AMLO_en_su_cierre_de_campa%C3%B1a.jpg" target="_blank" rel="noopener">Cierre de Campaña</a>)</p>

El candidato a la presidencia de México Andrés Manuel López Obrador (imagen: Cierre de Campaña)

En México es una leyenda: en 1938, el presidente Lázaro Cárdenas nacionalizó compañías petroleras angloholandesas y estadounidenses y convocó a todos los mexicanos a “brindar el apoyo moral y material necesario” para poder pagar la deuda que a partir de ese entonces Petróleos Mexicanos (Pemex) debía saldar.

Miles de mexicanos, conmovidos pero inseguros de cómo podían apoyar a la nueva empresa, hicieron fila frente al palacio presidencial con donaciones que iban desde pollos hasta joyas.

Una nueva ola de nacionalismo de recursos viene a la vez que crea nuevas alianzas internacionales, incluso con China.

Ochenta años más tarde, mientras México se prepara para elegir a un nuevo presidente este domingo, se está llevando adelante una reforma del sector energético, abriéndolo a la inversión extranjera a partir de la aprobación en el Congreso de la Ley de Transición Energética en el 2014. El país también deberá elegir si aprovechará este proceso, que ha atraído cientos de miles de millones de dólares en inversión extranjera, para emprender una transición de los combustibles fósiles a las energías renovables.

Mientras tanto, el tema de quién mantiene el control de los recursos naturales de México sigue siendo una cuestión divisoria y emotiva.

“Mi voto va a ser para quien tome un compromiso público de revertir las reformas constitucionales en materia de energía”, dijo el prominente político Cuauhtémoc Cárdenas, nieto de Lázaro Cárdenas, el mes pasado.

Una nueva ola de nacionalismo de recursos viene a la vez que crea nuevas alianzas internacionales, incluso con China. Empresas chinas han ganado licitaciones para neuvos bloques petroleros y también proyectos de enería renovable.

¿El próximo presidente de México, un país con una reputación de actuar rápidamente en el área del cambio climático a nivel global aprovechará la oportunidad de pisar un camino más sostenible?

Mensajes mezclados

Probablemente, ningún candidato presidencial serio cumplirá con la demanda de Cárdenas de renacionalización. Incluso el abrumador favorito en las urnas y candidato de izquierda, Andrés Manuel López Obrador, conocido como AMLO, del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), que se ha comprometido a no detener la reforma.

AMLO ha dicho que, bajo su supervisión puede existir una mayor participación del estado en el sector petrolero, pero no habrá nuevas expropiaciones. La posición sobre el cambio climático del ex alcalde de la Ciudad de México y  candidato a la presidencia en dos ocasiones, es poco clara.

Él se ha comprometido a “acelerar la transición energética” pero, al mismo tiempo, a “rehabilitar las centrales termoeléctricas”.

“López Obrador, y mucho más los otros candidatos, ponen el medio ambiente en el último lugar”, dijo Yolanda Trápaga, investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Agrega que el ganador de las elecciones va a encontrar un país “devastado” a causa de la minería a cielo abierto y proyectos de infraestructura “mal hechos”.

Pero según Trápaga, la postura eventual de AMLO dependerá de su equipo. Esto contrasta con los candidatos que se posicionan en el segundo y tercer lugar, Ricardo Anaya y José Antonio Meade, quienes aprobaron la reforma energética y este último lo hizo en su anterior cargo como ministro del Interior, agrega Trápaga.

David Shields, un consultor de energía radicado en la Ciudad de México, dijo al Latin America Energy Advisor que el equipo de AMLO tiene “ideas emocionantes sobre involucrar a las personas a nivel comunitario en proyectos de energía renovable”. Estos planes forman parte de una política de desarrollo más holística que integra empleos, salud, educación y medio ambiente, dijo.

Javier Flores Durón Lizoala, director para América del Norte, Europa y Asia, del Ministerio de Energía de México (SENER), dijo a Diálogo Chino que México ya trabaja con socios internacionales para fomentar el desarrollo y el despliegue de tecnologías limpias. Hay acuerdos con países como Dinamarca, Alemania, Francia, EE. UU y el Reino Unido, y en acuerdos multilaterales como el TLCAN.

Recientemente, México también firmó acuerdos con China para desarrollar pequeñas centrales hidroeléctricas a través del intercambio de información y expertos, agregó Flores Durón Lizoala.

Nuevas asociaciones de China

La licitación del área energética le ha ofrecido a México un punto de ingreso a China, a raíz de las tensas relaciones tras la cancelación de dos grandes proyectos. La empresa china Jinko Solar obtuvo la adjudicación de contratos para dos proyectos solares en los estados de Jalisco y Yucatán, que generarán una combinación de 170 megavatios.

Chinese Envision Energy International, en consorcio con la empresa mexicana Vive Energía, ganaron las dos primeras licitaciones y desarrollarán dos parques eólicos en Yucatán.

Trápaga dijo que la adquisición de tecnología china podría ayudar a los objetivos ambientales de México, que incluyen alcanzar el 35% de su generación de fuentes ‘limpias’ para el 2030.

Sin embargo, Trápaga no cree que la reforma energética ofrezca oportunidades para que China respalde el desarrollo sostenible, cuando la visión del país se produce en torno al desarrollo de industrias extractivas y en la construcción de infraestructura. El enfoque nacional de “primero crecemos y luego cuidamos el ambiente” también significa un problema.

Además, la inversión en energías renovables palidece en comparación con los hidrocarburos, que han atraído más de US$150 mil millones en criterio de inversión extranjera.

La oportunidad de participar en el sector petrolero de México, por primera vez en casi 80 años, atrajo compañías de todo el mundo, incluida China National Offshore Oil Corporation (CNOOC), que obtuvo dos importantes bloques en las primeras licitaciones de hidrocarburos.

La mayoría de las partes del mundo generarán electricidad a partir de energía eólica y solar a un precio más bajo que el que obtendrían del carbón en el 2023

Tabaré A. Currás, miembro honorario de la Comisión de Cambio Climático y Energía Renovable de World Peace Builders, le dijo recientemente al Latin America Energy Advisor que las elecciones representan una gran oportunidad para movilizar a México hacia una nueva dirección.

“La economía basada en combustibles fósiles en México debe moverse más rápidamente hacia un paradigma de energía descarbonizada, que seguramente generará resultados positivos para todas las partes interesadas”, dijo, y agregó; “Los candidatos no deberían perder la oportunidad de presentar un caso convincente para esta necesaria transformación”.

La Corporación Financiera Internacional (IFC) del Grupo del Banco Mundial estima que México representa una oportunidad para los inversores en energía renovable, valuada en US$75 mil millones de aquí al 2030.

De todos los países latinoamericanos, sólo Brasil tiene un mayor potencial, según indicó un informe de la CFI sobre inversiones “climáticamente inteligentes” en la región.

Caen los precios de las energías renovables

Cuando el próximo presidente mexicano complete su mandato de 6 años (Maragarita Zavala, la única candidata femenina en competencia, abandonó la campaña a principios de este mes), la forma en la que el mundo genera y almacena energía puede haber cambiado drásticamente.

La mayoría de las partes del mundo generarán electricidad a partir de energía eólica y solar a un precio más bajo que el que obtendrían del carbón en el 2023, según establece un informe reciente de Bloomberg Energy Finance.

La caída en el costo,  se debe  en parte a la caída de los precios de las baterías de litio, un método cada vez más popular de almacenamiento de energía, pero al mismo tiempo impulsado por la fabricación china de tecnologías renovables más económicas.

“El argumento económico para construir nueva capacidad en base a carbón y gas se está desmoronando”, dijo a Bloomberg Elena Giannakopoulou, directora de economía energética de BNEF.

Según Lisa Viscidi, directora del programa de energía del grupo de expertos estadounidense Inter-American Dialogue, el liderazgo de México en las negociaciones internacionales sobre el clima – era el primer país en desarrollo en presentar un plan climático ante la ONU – está por delante de la generación de energía renovable.

México genera menos de un cuarto de su energía de fuentes renovables, según la Agencia Internacional de Energía (IEA), muy por debajo del promedio de América Latina que es del 50%.

Sin embargo, la creación del proceso de reforma de un mercado de energía a gran escala y un sistema de emisión de certificados de energía limpia son hechos prometedores para el crecimiento de las energías renovables, aseguró Viscidi ante el Advisor:

“La reforma energética ha creado un marco sólido e importantes incentivos para aumentar la energía renovable en México”.